Una cosa si tengo claro es que en casa los quichés gustan y mucho, cada vez que preparo uno no queda ni las migas, en esta ocasión he querido cambiar un poco y hacer uno diferente. Ademas con los quichés podéis jugar con todos los sabores posible.
Así que si os gustan no paréis de inventarlos y disfrutar de diferentes sabores y colores, porque la visualización también es muy importante.
Ingredientes:
- 1 hojaldre
- Aceite de oliva
- 1 cebolla
- 1 berenjena
- 125 grs de beicon
- Unos tomates cherry para decorar
- 3 huevos
- 200 grs. nata cocinar
- Queso rallado
- Sal y pimienta
Preparación:
Primero vamos a estirar un poco el hojaldre y lo ponemos en el molde, pinchamos con un tenedor y horneamos unos 10 minutos.
Preparamos una sarten tipo work, agregamos el aceite, picamos la cebolla y la agregamos, pochamos un poco mientras partimos en trocitos la berenjena, cuando la tengamos picada la agregamos a la sarten y vamos dorando. Añadimos a continuación el beicon y terminamos de pochar.
Agregamos un poco de sal y pimienta aunque no demasiada, ya que el beicon ya está algo salado.
Mientras, ya habrá terminado de hornearse el hojaldre, así que añadimos la berenjena que estará lista.
Batimos en un bol los huevos y después agregamos la nata y seguimos batiendo un poco más, lo añadimos a la berenjena.
Pasamos un poco por la sarten los tomates cherry para que coja un ligero toque asado, lo agregamos a la masa y esparcimos queso rallado por encima.
Horneamos unos 20/25 minutos hasta que veamos que esté cuajado, si quieres puedes poner un poco a gratinar el quiché una vez terminado, para que coja un poco de color dorado.
Listo a disfrutarlo.
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